Una Navidad repleta de regalos en forma de canción, con los actos de los diferentes coros y grupos que nos han visitado.




De cariño, a través de las cartas personalizadas que los jóvenes del instituto San Cristóbal nos entregaron y leyeron con su NAVIDAD A LA CARTA.


De intercambio, con la compañía que nos hicieron los chavales del colegio Consolación.



De ilusión recuperada al recibir las visitas de la pareja Noel y las tres Reinas Magas.


De abundancia con las mesas engalanadas y ricos manjares




Pero, sobre todo, de amor. Del amor incondicional de unas hijas y unos hijos, esposas y esposos, hermanas y hermanos, nietas y nietos, yernos y nueras, y también compañeras y compañeros residentes y trabajadores, que nos arropan y que cada mes (no solo en diciembre) nos reparten un poquito de ese espíritu navideño.
Mantengamos viva esa conciencia navideña durante todo el año.